miércoles, 9 de diciembre de 2009

EL PROPOSITO DE DIOS EN LA TORMENTA.

ROMANOS 8:28,29 Los creyentes pueden decir como despenderán a las tempestades de la vida. Pueden culpar a los demás y convertirse en unos resentidos y amargados, o volverse al SEÑOR y decirle: ¿Que propósito tienes para mi vida? Buscar al SEÑOR y someternos a su instrucción en medio de nuestro sufrimiento, es lo que debemos de hacer siempre. Por ejemplo, en el A.T. El rey David tomo unas decisiones equivocadas catastróficas para las cuales DIOS permitio tormentas que purificaran su vida. El líder de la nación se había extraviado de la senda correcta, pero las dolorosas experiencias que tuvo lo pusieron de nuevo en el centro de la voluntad de DIOS. Podríamos pensar que el método divino fue duro, pero DAVID no pensaría igual. El escribió:"Antes que fuera yo humillado, descarriado andaba; mas ahora guardo tu palabra.....Bueno me es haber sido humillado, para que aprenda tus estatutos" (SALMO 119:67,71). Hacer que los creyentes tengan una armoniosa comunión con el SEÑOR, es solo una de las razones por las que EL permite tormentas en la vida. Algunas dificultades tienen el propósito de remover las distracciones, para que concentremos nuestra atención en el SEÑOR. El propósito de otras tempestades es conformarnos a la imagen de JESUCRISTO. Nuestro placer personal no es la prioridad mas importante. El interés personal de DIOS es formar en nosotros a un servidor sabio y obediente que lo ame. Cuando nuestra vida es sacudida por una tormenta, el SEÑOR ya esta planeando como convertir la destrucción en una bendición. Busque su propósito y coopere con EL para lograr la promesa de ROMANOS 8:28 Y sabemos que a los que aman a DIOS, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados.

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